El Italiano es una novela de ficción histórica publicada en 2021. Está ambientada en 1942 y 1943, durante la Segunda Guerra Mundial, y basada en hechos reales.  Según cuenta Pérez Reverte, la idea para el libro se le ocurrió después de una entrevista con una librera en Venecia en los años 80. Ella será uno de los personajes centrales de la novela, Elena Arbues. La historia comienza cuando Elena encuentra a un casi moribundo personaje temprano una mañana, en las playas de la Bahía de Algeciras. No sabiendo quién es, lo lleva hasta su casa donde le hace los primeros auxilios. Pronto descubre que se trata de Teseo Lombardo, miembro de un grupo de combate llamado Orsa Maggiore de la Marina italiana, en misión secreta contra el enemigo británico cuyos integrantes se camuflan como trabajadores de un barco. Estos llevan a cabo audaces ataques contra barcos aliados en el puerto de Gibraltar y la bahía de Algeciras piloteando de a dos unos torpedos conocidos como maiale .

A partir de ese encuentro fortuito, nace un romance entre Elena y Teseo que es el eje de la trama de la novela, una relación condicionada por la guerra y los peligros del espionaje. Ella es viuda y atiende su propia, pequeña librería a pocas cuadras de la frontera con Gibraltar, fuertemente custodiada por el ejército y la marina británica. Teseo tiene un gran compañero de sabotajes y amigo, Gennaro Squarcialupo quien, según nos cuenta el autor, sobrevivió a la guerra y terminó como dueño de un modesto restorán en Nápoles.

No es el único personaje secundario importante, también está el doctor Zocas, un erudito habitué de la librería que ayudará a Elena en su decisión de arriesgar su vida por amor. Sin olvidar al malvado comisario Campello, un ferviente servidor del gobierno franquista ni a los demás compañeros de Lombardos, los oficiales británicos y los infaltables personajes dudosos típicos de un escenario clave en la guerra, donde bullen los espías de todos los bandos

La novela es narrada en tercera persona y alterna entre diferentes puntos de vista, incluyendo el de Lombardo, Arbués y otros personajes secundarios. El estilo de escritura de Pérez-Reverte se caracteriza por su prosa concisa y evocadora, así como por su atención al detalle histórico. El autor utiliza un lenguaje preciso y efectivo para describir las escenas de acción, así como para crear un ambiente auténtico y detallado de la época y los lugares en los que se desarrolla la historia. Es así como logra capturar la complejidad y las motivaciones de cada personaje, así como sus relaciones y dinámicas entre ellos.

Es interesante también, la inclusión de la técnica periodística a través de entrevistas a algunos de los personajes reales que fueron protagonistas de los hechos que narra la obra. Por otro lado, nos recuerda que todos los héroes en la novela son ambiguos, y en tiempos de guerra aún más, por lo que la línea que divide a los buenos y los malos es artificial y casi residual, tanto los aliados como los italianos, tienen cierto grado de complejidad y matices.

El Italiano ha recibido excelentes críticas por parte de lectores y especialistas. Se destaca el manejo de los tiempos narrativos, la descripción detallada de los escenarios y el desarrollo emocional de los personajes. Además, es una obra que nos invita a reflexionar sobre temas universales como el amor, la guerra y el sacrificio.

En definitiva, Pérez-Reverte demuestra una vez más su habilidad para crear personajes complejos y atractivos, y su estilo literario elegante y fluido hace que la lectura sea una experiencia sumamente gratificante.